SITUACIÓN LABORAL DE LAS MUJERES NO RECUPERAN CIFRAS PRE PANDEMIA

A propósito del segundo aniversario de la llegada del primer caso de Covid-19 al país y la conmemoración del día internacional de la mujer 2022, la Organización Internacional del Trabajo en América Latina y el Caribe elaboró un documento donde se analizan y describen las políticas de igualdad de género relativas al mercado laboral latinoamericano, al igual que se grafican las cifras de la situación laboral en escenarios previos (2019), in situ (2020) y posteriores (2021) a la pandemia. Tal como su título lo indica, el análisis está principalmente orientado a la visualización de la situación laboral femenina frente a las restricciones implementadas durante el año 2020, la recuperación de la tasa de participación laboral tras la abrupta caída que el 2020 significó, tanto para hombres como para mujeres. […]

Hacia el 2019, la tasa de participación de mujeres, entendida como la proporción de la Población Económicamente Activa que trabaja o busca trabajo en el mercado laboral, tuvo una variación negativa de aproximadamente 12%, en tanto experimentó una disminución de 46,9 a 41,2 puntos porcentuales entre el 2019 y 2020, reducción que se recuperó en el periodo 2020-2021 con una variación positiva del 5,7% al recuperarse con 43,6 puntos porcentuales. Traducido a números, de los aproximadamente 23 millones de empleos ocupados por mujeres perdidos en el 2020, solo han logrado recuperarse durante el 2021 19 millones de empleos, quedando aproximadamente 4 millones de puestos por ser recuperados.

En contraste, los empleos masculinos perdidos, calculados en aproximadamente 26 millones, se recuperaron hacia el primer trimestre del 2021. La OIT explica esta divergencia entre las cifras por medio de la focalización de los empleos ocupados por mujeres, específicamente los sectores de hotelería, restaurantes y domésticos, los cuales, en relación a las medidas de confinamiento y clausura de servicios en el 2020, fueron algunos de los más afectados por el impacto de dichas políticas para el evitamiento de contagios en primera instancia.

Por otro lado, otro factor de influencia hallado por la OIT corresponde a la mayor tendencia general de las mujeres a ubicarse en sectores informales de la economía a nivel internacional. Por lo tanto, sectores de empleo con alta feminización sufren una recuperación más accidentada que los empleos masculinizados, como lo son los sectores de construcción y transporte, por ejemplo, hecho que se ha traducido en un mantenimiento de la tasa de desempleo para las mujeres en el 2020 y 2021, factor que se reduce para los hombres en el mismo periodo. Solamente Argentina, Paraguay, Uruguay y Granada han logrado recuperar los niveles de participación femenina pre-pandemia, y Bolivia es el único país de la región cuyos indicadores han evidenciado un aumento con respecto a la situación laboral de 2019.

Para la OIT, el paquete de medidas propuesto para mitigar el impacto económico y social generado por la pandemia fue elaborado y puesto a disposición de los gobiernos, en cuyos contenidos se incluye la atención a la situación de pobreza de las mujeres con enfoque de género, la protección de los trabajadores y la preservación de sectores económicos vulnerables.

Las políticas de transferencia monetaria, que se tradujeron a través de bonos en los distintos países que las aplicaron, fueron construidas bajo una interpretación con enfoque de género, en las cuales se sugería priorizar a mujeres, jefas de hogar, madres y trabajadoras de sectores vinculados al trabajo doméstico y sectores informales, independientemente de su condición como madres de niños pequeños.

La importancia de la protección del trabajo en tiempos de pandemia fue un objeto de preocupación medular para la OIT, por lo cual la sugerencia de aplicación de medidas focalizadas para la protección de la empleabilidad de sectores vulnerables, en este caso, el sector femenino, constituye un factor de importancia palpable para la protección integral de los trabajadores en una nación, pues los efectos en dichas porciones de la población evidencian una recuperación más pausada que los sectores masculinizados. Hoy, en el Día internacional de la mujer, que rememora la conquista de derechos laborales por las mujeres, es bueno recordarlo.