La Caballa congelada tiene posibilidades comerciales en el mercado turco
El jefe de la sección consular de la Embajada de Perú en Turquía, Eduardo Castañeda, señaló que la población de ese país supera los 83 millones de personas y tiene como una de sus preferencias el consumo de especies hidrobiológicas.
“Es importante mencionar que, en las grandes ciudades turcas como Estambul, Ankara y Esmirna, una buena proporción de habitantes tiene la costumbre de comer en restaurantes y frecuenta grandes centros comerciales y cadenas de retail, donde tienen fácil acceso a una mayor variedad de productos del mar”, comentó.
Entre las ventajas para el exportador peruano de caballa congelada se puede mencionar que el Estado turco estableció desde hace 5 años temporadas de veda de este recurso, por lo tanto, existen meses del año donde no se encuentra esta especie hidrobiológica en los supermercados.
Además del valor nutritivo, el buen sabor y un precio competitivo –prosiguió– el mayor volumen de producción de caballa en el Perú permitiría abastecer el requerimiento de los compradores de Turquía. Para esta consolidación, consideró fundamental la implementación de estrategias de marketing a fin de dar a conocer las propiedades positivas de este producto, así como establecer rutas que disminuyan los costos de la distancia geográfica.
Según reportes elaborados por las embajadas peruanas en Turquía (Europa-Asia) y Vietnam (Asia), como parte de un convenio entre la Asociación de Exportadores (ADEX), los Centros Académicos de ADEX (Ceadex) y el Ministerio de Relaciones Exteriores (RR.EE.). Existen buenas oportunidades para la exportación de productos pesqueros para Consumo Humano Directo (CHD).